Dr. Bianchi.- Buen día a todos.
Hay muchos padres con quienes ya nos conocemos; en algún lugar me han escuchado. Por eso, cuando tengo que hablar, tengo miedo de aburrirlos porque seguramente voy a reiterar conceptos que ya tengo internalizados.
El presentador está fantástico; viene de trabajar 12 horas y está como nuevo. Yo, en cambio, estoy todo roto. (Risas). Estuve tomando antibióticos por la alergia. Igual, vamos a charlar un poco.
Hoy se conmemoran 14 años de este grupo de San Justo. Conmemorar la existencia de un grupo es siempre una buena noticia porque seguramente muchos de los integrantes de estos grupos se han beneficiado al transitar un tiempo por estas reuniones.
Este tiempo es un tiempo interno, como el duelo, que responde a un tiempo interno y no cronológico. Hay quienes permanecen más tiempo en un grupo, o menos tiempo. Pero no me cabe ninguna duda de que la permanencia en el grupo ayuda. En todos los grupos de ayuda mutua pasa lo mismo.
Renacer y, en general, todos los grupos de ayuda mutua para padres que perdieron hijos, tienen características especiales, distintas a los grupos de ayuda mutua que han precedido a Renacer. Ustedes saben que todos estos grupos han tomado, en cierto modo, el esquema referencial de Alcohólicos Anónimos, uno de los primeros grupos de ayuda mutua que se instalaron hace ya mucho tiempo. En Norteamérica hay un grupo, Amigos Compasivos, que es muy antiguo. Actualmente, en todo el mundo hay muchísimos grupos de ayuda mutua para poder resolver adicciones, por ejemplo, o para poder sobrellevar patologías.
Pero Renacer es distinto porque nosotros no nos reunimos para superar una adicción, ni tampoco para sobrellevar una patología, dado que la pérdida de un hijo –y ésta es una premisa importante– no es una patología, no es una enfermedad, sino que se trata de una crisis existencial. Y, como no es una enfermedad, la ciencia no tiene la respuesta para ese dolor que se escribe con mayúsculas, que es el DOLOR que produce la pérdida de un hijo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario o tu testimonio